Crítica al disco de R de Rumba, en ARAGÓNRUTAS 30
Que el Hip Hop nacional tiene en Zaragoza una de sus capitales viene de lejos. Ya en los últimos 80 y primeros 90 se dieron en la ciudad una serie de proyectos que, si bien su repercusión fue anecdótica en la mayoría de los casos, sirvieron de base para que grupos como los Violadores del Verso sean hoy punta de lanza de un género que se ha consolidado en el mercado musical de nuestro país.
Una de las últimas propuestas viene de la mano de R de Rumba, productor y DJ precisamente de Violadores que, esta vez al margen del grupo, se ha rodeado de algunos de los nombres más conocidos del panorama nacional: los sevillanos Zatu (SFDK), Mala Rodríguez y Tote King, el zaragozano Kase-O, Frank-T y unos cuantos más. Si bien el resultado no deja de ser lo que se espera (rimas de alto voltaje y parental advisory con bases de Hip Hop puro), constituye un peldaño más en la escalada de calidad del estilo en nuestro país. Ritmos de la calle, importados en su tiempo de EEUU, que han calado en ciudades como Zaragoza, seguramente por utilizar un lenguaje llano y sin tapujos que retrata, tal vez con excesiva crudeza, la realidad urbana de cada día.
Una de las últimas propuestas viene de la mano de R de Rumba, productor y DJ precisamente de Violadores que, esta vez al margen del grupo, se ha rodeado de algunos de los nombres más conocidos del panorama nacional: los sevillanos Zatu (SFDK), Mala Rodríguez y Tote King, el zaragozano Kase-O, Frank-T y unos cuantos más. Si bien el resultado no deja de ser lo que se espera (rimas de alto voltaje y parental advisory con bases de Hip Hop puro), constituye un peldaño más en la escalada de calidad del estilo en nuestro país. Ritmos de la calle, importados en su tiempo de EEUU, que han calado en ciudades como Zaragoza, seguramente por utilizar un lenguaje llano y sin tapujos que retrata, tal vez con excesiva crudeza, la realidad urbana de cada día.
0 comentarios